Las tierras raras son un grupo de elementos químicos que incluyen al cerio, disprosio, europio, gadolinio, lantano, iterbio, neodimio, praseodimio, prometio, terbio, tulio y ytrio. A pesar de su nombre, las tierras raras no son raras en términos de su abundancia en la corteza terrestre, sino que se llaman así porque son difíciles de encontrar en depósitos concentrados y porque su proceso de extracción y purificación es complejo.
Las tierras raras tienen una amplia variedad de aplicaciones tecnológicas, desde la fabricación de imanes de alta energía y catalizadores para la industria química hasta el uso en pantallas de televisores, teléfonos móviles y baterías recargables. También se utilizan en la producción de lámparas fluorescentes, vidrios especiales, aleaciones para la aviación y la fabricación de equipos médicos.
La mayoría de las tierras raras son extraídas y producidas en China, aunque hay otros países, como Australia, Brasil, Canadá y Estados Unidos, que también producen pequeñas cantidades. El creciente uso de tecnologías limpias y la electrificación de los vehículos está aumentando la demanda de tierras raras, lo que ha llevado a una mayor preocupación por la seguridad del suministro y la diversificación de los proveedores.
A pesar de sus aplicaciones útiles, la extracción y producción de tierras raras puede tener impactos ambientales significativos y preocupaciones de seguridad laboral. Por lo tanto, es importante que se realice de manera responsable y sostenible. Además, se están investigando alternativas a las tierras raras en varios campos para reducir la dependencia de estos elementos.