La justicia es un concepto de moral basada en la ética, la racionalidad, la ley, la ley natural, la religión, la equidad y la equidad, así como la administración de la ley, teniendo en cuenta los derechos inalienables e innatos de todos los seres humanos y ciudadanos, el derecho de todas las personas a igual protección ante la ley de sus derechos civiles, sin discriminación por motivos de raza, género, orientación sexual, identidad de género, origen nacional, color, origen étnico, religión, discapacidad, edad, riqueza u otras características, y se considera además que incluye la justicia social.
Se puede considerar que la justicia es distinta de la benevolencia, la caridad, la prudencia, la misericordia, la generosidad o la compasión, aunque se entiende regularmente que estas dimensiones también están interrelacionadas. La justicia es el concepto de virtudes cardinales, de las cuales es una.
La justicia también se la ha asociado tradicionalmente con los conceptos de destino, reencarnación o Divina Providencia, es decir, con una vida de acuerdo con el plan cósmico.